Los líquenes no engañan: las zonas ganaderas de Cataluña están contaminadas por amonio

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  • líquenes no engañan: zonas ganaderas Cataluña están contaminadas amonio
  • El nitrógeno que contiene el amonio es un nutriente esencial para la vida, pero cuando la deposición rebasa la capacidad de procesamiento de los ecosistemas se convierte en una amenaza ambiental. Investigadores de la UAB han determinado cuál es el nivel crítico de concentración de amonio en el aire a partir del efecto en los líquenes, muy sensibles a la contaminación atmosférica.

Sobre la Entidad

Universitat Autònoma de Barcelona
La Universidad Autónoma de Barcelona es una universidad pública de España, creada en 1968. La mayor parte de sus centros docentes y servicios extra-académicos están en el Campus de Bellaterra situado en Sardañola del Vallés.

La explotación ganadera y la agricultura son las fuentes más importantes de emisión de amonio a la atmósfera, emisiones que derivan de la volatilización de este gas a partir de las deyecciones ganaderas o de fertilizantes sintéticos amoniacales aplicados a los cultivos. En pequeñas dosis, los ecosistemas resultan beneficiados por la deposición de componentes nitrogenados (entre ellos el amonio) ya que el nitrógeno forma parte del numerosas enzimas, proteínas y los ácidos nucleicos, y por tanto, es un nutriente esencial para la vida. Pero cuando la deposición de nitrógeno rebasa la capacidad de procesamiento de los ecosistemas, se nos presenta un problema. Tanto es así que algunos autores consideran las alteraciones del ciclo del nitrógeno como una de las mayores amenazas ambientales del planeta, al mismo nivel que el cambio climático o la pérdida de biodiversidad.

A nivel ecosistémico, el exceso de exposición al nitrógeno provoca la pérdida de biodiversidad, la pérdida de la calidad del agua (si la elevada deposición de N alcanza los acuíferos), la acidificación de suelos y aguas y el desequilibrio nutritivo en plantas y otros organismos. Asimismo, la pérdida de la calidad del aire derivada de las emisiones de compuestos nitrogenados puede afectar la salud humana.

Para contrarrestar estos problemas, a principios de los años 1980s la UN / ECE (Comisión Económica para Europa de las Naciones Unidas) impulsó la creación de la CLRTAP (Convención para la Contaminación Atmosférica Transfronteriza de Larga Distancia) que ha ido formulando varios protocolos con el objetivo de reducir las emisiones de nitrógeno y otros contaminantes y sus efectos sobre los ecosistemas. Estas medidas, en general, han tenido resultados positivos. Pero para el amonio, y concretamente en España, no se ha mejorado mucho: las emisiones en el año 2016 eran un 39% más altas que en el año 1980.

Para ayudar a tomar decisiones para el control de las emisiones, se ha desarrollado el concepto de Nivel Crítico (Critical Level) que se define como el valor umbral de la concentración atmosférica de un contaminante a partir del cual se empiezan a detectar efectos perjudiciales en el ecosistema. Nuestro estudio pretende determinar este valor umbral respecto del amonio en un bosque de encinar que rodea una explotación ganadera en Osona, estudiando como resultan afectadas las comunidades liquénicas que crecen sobre las encinas circundantes.

Los líquenes y los musgos son unos excelentes indicadores del estado del aire, debido a que dependen de la atmósfera para obtener el agua y nutrientes, y porque no tienen una cutícula protectora (como las plantas), lo que los hace muy sensibles a la contaminación atmosférica. Así, muchas especies de líquenes no pueden vivir a partir de determinadas concentraciones de contaminantes en el aire, por lo que son considerados buenos bioindicadores.

Para hacer el estudio de los niveles críticos de amonio establecimos 15 parcelas en un transecto de 600m en un encinar a sotavento de una granja cercana a Vic. En los puntos de muestreo hicimos inventariar la frecuencia de las diferentes especies de líquenes epífitos (en 4 encinas por parcel.la) y medimos quincenalmente las concentraciones de amonio cada parcela a lo largo de un año. Efectivamente, encontramos una relación inversa entre la concentración de amonio en el aire y la diversidad de las comunidades liquénicas oligotróficas. El nivel crítico se determinó en 2,6 microgramos de amonio por metro cúbico, un valor que es unas 3 veces más alto que el de referencia en Europa. Esta diferencia se interpreta por el hecho de que nos encontramos ante un ecosistema que ha sido históricamente contaminado respecto de la situación natural en ausencia de la agricultura y ganadería.

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