En un reportaje producido por la Televisión Local de Cerceda, municipio coruñés en el que se emplaza el complejo medioambiental de Sogama, el Director General de esta empresa pública, Isidro García Téllez, aseguró que, con la nueva planta de clasificación de materiales contenidos en la bolsa negra, y que conforma la primera fase de la ampliación de esta infraestructura industrial, la compañía logrará tratar, en condiciones óptimas, el 100% de los residuos urbanos producidos por los 294 ayuntamientos adscritos a su sistema de gestión. De esta forma, el complejo pasará de procesar 550.000 toneladas a 1 millón, pudieron absorber la totalidad de basura doméstica generada en el conjunto de la comunidad.
La empresa gallega Valtalia, adjudicataria del proyecto de ampliación, al que se ha destinado una inversión de 29 millones de euros, ha conseguido construir y equipar esta instalación en tan solo 8 meses. Y lo ha hecho con ingeniería propia. Ahora, tal y como aseguró García Téllez, se abre un período de pruebas de tres meses que culminará con la puesta en marcha de la nueva planta a finales de este mismo año. Acto seguido, se acometerá la remodelación de la actual planta de reciclaje, tratamiento y elaboración de combustible y, en el último tramo del 2019, una vez cerrada esta segunda fase, Sogama se convertirá en el complejo más grande, moderno, innovador y eficiente de Europa y en uno de los más destacados a nivel mundial.
La nueva infraestructura traerá consigo dos beneficios fundamentales en el marco del paquete europeo de economía circular y en la hoja de ruta de la compañía: mayor reciclaje y menor vertido
De residuo al recurso
Pero, más allá de las ventajas propias de una obra de estas características a nivel de capacidad, la nueva infraestructura traerá consigo dos beneficios fundamentales en el marco del paquete europeo de economía circular y en la hoja de ruta de la compañía: mayor reciclaje y menor vertido.
El Director General explicó que la previsión es multiplicar por cuatro las actuales cifras de recuperación, destinando a la industria recicladora del orden de 120.000-140.000 toneladas de materiales cada año que se convertirán en nuevos productos para ser reincorporados al circuito comercial con una nueva vida, contribuyendo de esta forma al ahorro de energía y materias primas vírgenes.
A través de máquinas ya preparadas y diseñadas para tal fin, y que cuentan con trómeles, lectores ópticos, electroimanes y corrientes de inducción, entre otros elementos, Sogama conseguirá separar, por tamaños y formas, 10 materiales diferentes (papel/cartón, vidrio y distintas tipologías de plásticos), consiguiendo unos altos índices de recuperación que le permitirán reducir en gran medida la cantidad de basura que actualmente acaba en el vertedero de Areosa.
No obstante, García Téllez precisó que, aunque España vierte una media del 57% de los desechos, Sogama se encuentra actualmente en el 25%, previendo alcanzar en breve el 10%. “Nuestro objetivo es alcanzar el vertido técnico cero, es decir, que sólo se lleve a vertedero aquella parte de la basura que no se pueda reciclar ni valorizar material o energéticamente”. Alcanzar este objetivo permitirá a Galicia estar en línea con países europeos punteros tales como Alemania, Suecia, Bélgica y Holanda, caracterizados por presentar altas tasas de reciclado y valorización energética, pero bajos porcentajes de vertido, dando debido cumplimiento a la gestión jerarquizada que promulga la Unión Europea y en la que el vertedero queda relegado a último lugar por ser la opción con mayor impacto sobre el medio ambiente y la salud pública.
Si bien Sogama ha llegado a generar 1.000 empleos, entre directos e indirectos, García Téllez matizó que el alto nivel de automatización de la nueva planta, en plena sintonía con la industria 4.0, únicamente generará puestos de trabajo en el área de control, mantenimiento y limpieza. Como contraprestación, “se remitirá más cantidad de materiales a la industria transformadora, circunstancia que, indudablemente, contribuirá a la creación de empleo verde”, resolvió.
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