"Buscamos el paralelismo entre reciclaje y reinserción"

0
  • "Buscamos paralelismo reciclaje y reinserción"
  • Así lo expresó el Director de la Escuela de Adultos del Penal de Monterroso, Pedro Cantero, en una entrevista concedida a Onda Cero, donde habló del libro editado recientemente por la institución bajo el título “El Huerto Ecológico”.
  • En el mismo se da cuenta del trabajo medioambiental desarrollado por el centro penitenciario, difundiendo, entre otras iniciativas, la construcción de un invernadero con material reciclado, así como la puesta en marcha de un huerto en el que actualmente cultivan distintos productos.
  • Cantero también se refirió a la firme apuesta de la institución por el autocompostaje, disponiendo para ello de 10 compostadores cedidos por Sogama que permiten la transformación de la materia orgánica en un abono natural de calidad con magníficas propiedades nutritivas para el suelo.
  • Con estas actividades, el Penal pretende reforzar las posibilidades de reinserción de los reclusos cuando alcancen la libertad.

Sobre la Entidad

SOGAMA
La Sociedade Galega do Medio Ambiente (SOGAMA) es una empresa pública autonómica, creada en el año 1992 por el Decreto 111/1992 de la Xunta de Galicia, y adscrita a la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas.

En declaraciones a Onda Cero, Pedro Cantero, Director del Centro Educativo integrado en el Penal lucense de Monterroso, dio a conocer una gran parte del trabajo medioambiental que realiza esta institución para contribuir a esa ardua tarea que supone la reinserción social de las personas.

El libro, bautizado con el título “El Huerto Ecológico”, podría considerarse en buena medida un compendio de la labor realizada por el penal en el marco de un proyecto europeo sobre desarrollo sostenible en el que también participaron países tales como Turquía y Austria.

Fe en un futuro mejor

Cantero lo tenía claro desde el principio. Quería construir un invernadero, pero desde una perspectiva medioambiental, utilizando para ello materiales de desecho. Con tal fin, impulsó la recogida de botellas de agua vacías, constituyendo éstas los principales elementos de una infraestructura, única y singular, de la que hoy hacen gala y que ha sido fruto del interés y el esfuerzo de los internos por realizar algo novedoso, útil, provechoso y con perspectivas de futuro.

El huerto ecológico consiguió captar la atención y la colaboración de reclusos de 40 diferentes nacionalidades

La implantación del compostaje doméstico fue otra de las actuaciones que lideró el Director de la escuela. Tras la firma de un convenio de colaboración con Sogama, ésta cedió a la prisión 10 compostadores, que ubicaron en puntos estratégicos para que los reclusos depositasen en los mismos los restos orgánicos y pudiesen así obtener compost. La alta calidad del mismo fue verificada y acreditada por la propia Universidad de Santiago de Compostela a través del análisis científico de varias muestras, concluyendo su idoneidad como elemento fertilizante para el suelo, pudiendo ser aplicado en la agricultura con absolutas garantías y sin restricciones.

La ilusión y el empeño que los internos ponían en el proyecto valía la pena, y a partir de entonces el medio ambiente se erigió en elemento transversal a todas las actividades realizadas en el centro. Pedro Cantero considera que “estas actuaciones nunca son un fin, sino un medio para que cuando nuestros alumnos obtengan la libertad, dispongan de mayores posibilidades de reinserción en la sociedad, dotando de mayor eficiencia al proceso”. Se muestra convencido de que, con iniciativas de este tipo, aprenden e interiorizan valores tan importantes para la vida como el trabajo en equipo, la solidaridad y el respeto, entre otros.

Asimismo, apuntó que el huerto ecológico consiguió captar la atención y la colaboración de reclusos de 40 diferentes nacionalidades, aportando todos ellos su granito de arena en la consecución de un objetivo común: el cuidado y la protección del entorno.

El Director de la escuela reconoce que propiciar el correcto funcionamiento del huerto no fue una tarea sencilla dada la inexperiencia en la materia. “La cosecha del primer año no resultó muy exitosa, pero ello no nos desanimó; todo lo contario. Aprendimos de nuestros errores y cada año hemos ido mejorando. La de este año ha sido una cosecha pequeña, pero buena”, desveló. Tomates, pimientos, calabacines e incluso hierbas aromáticas conforman el listado de artículos.

Si bien el Penal estudió la posibilidad de destinar los productos a bancos de alimentos, lo cierto es que, dado su carácter perecedero, las limitaciones son muchas, especialmente de carácter sanitario, por lo que, de momento, los utilizarán a modo de autoconsumo.

Comentarios