Varias calles y avenidas del municipio de Llíria están siendo dotadas de forma gradual de nuevos contenedores de residuos sólidos urbanos, para cambiar los que estaban en mal estado o se requería una mayor capacidad de recogida.
El Ayuntamiento ha realizado la compra de 300 nuevas unidades, tanto de gran capacidad (1.000 litros) como de capacidad mediana (800 litros), además se han adquirido nuevas piezas, como las tapas, para los ya existentes, y material extra de señalización.
Los nuevos contenedores incorporan también un adhesivo con el mensaje “Llíria neta, gràcies a tu”, con el objetivo de concienciar a la ciudadanía y prestar un servicio en óptimas condiciones.
El servicio municipal de Residuos Sólidos Urbanos (RSU), en función de las necesidades detectadas por los operarios y las reclamaciones del vecindario, ha iniciado la reposición y ampliación de contenedores en varios puntos del término municipal. En este sentido, ya se ha realizado la sustitución por nuevas unidades en varios viales del casco urbano, así como en urbanizaciones como La Vall de Llíria, Secanet, Regalón, Corral de la Marquesa, Puigilis, Montejarque, Calabacín o Montearagón.
Más contenedores, mejor servicio
Según explica la concejala de Sostenibilidad, Elena Jiménez, “esta inversión se ha hecho gracias a la incorporación de una partida específica en los presupuestos de 2017 que abordara la necesidad de adquisición de más contenedores para mejorar el servicio de recogida en los núcleos residenciales de las urbanizaciones y en determinadas zonas del casco urbano, y que prevemos repetir en próximos ejercicios para mantener el equipamiento en óptimas condiciones”.
Asimismo, desde la concejalía “se pide una colaboración y concienciación ciudadana para que la vida útil de los contenedores sea más duradera, echando a estos recipientes aquellos residuos que corresponden y haciendo un uso responsable de los mismos”.
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